miércoles, mayo 1, 2024
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El régimen de China bloqueó Clubhouse, una app para discusión política donde se debatía sin censura

El foro se convirtió en un inusual espacio para hablar sobre temas como la represión a los uigures o el gobierno de Xi Jinping, pero ya no es accesible desde el gigante asiático y fue eliminada de la tienda de aplicaciones móviles.

Las autoridades chinas bloquearon el acceso a Clubhouse, una aplicación de redes sociales que permitía a sus usuarios en el país discutir temas delicados para el régimen de Xi Jinping y que llamaba la atención por ser uno de los pocos espacios disponibles para el debate.

La represión de los uigures musulmanes, la represión de la Plaza de Tiananmen y las relaciones sexuales sadomasoquistas: nada estaba fuera de los límites de las salas de chat de Clubhouse, que eran bulliciosas y no estaban filtradas, antes de que los censores chinos silenciaran la conversación.

Durante aproximadamente una semana, la aplicación de audio estadounidense, que recientemente ha recibido el apoyo de Elon Musk, ha mantenido un debate abierto sobre China. Ofrecía a los usuarios de China continental y de habla china un espacio poco común para diseccionar los tabúes de la política y la sociedad, una pluralidad de voces normalmente silenciada dentro de China por el Partido Comunista.

Sin embargo, a última hora del lunes apareció un mensaje de error para los usuarios chinos que se conectaban sin una VPN para establecer una conexión segura, una señal reveladora de que los censores del Estado se habían apoderado del debate.

La medida coloca a Clubhouse entre los miles de ciberstios y apps a los que el gobernante Partido Comunista impide acceder para tratar de controlar lo que la población china ve y lee.

El servicio para los usuarios en el país quedó interrumpido alrededor de las 19:00 horas del lunes en Beijing, según GreatFire.org, una ONG estadounidense que monitorea el filtrado de internet que realiza China y trata de ayudar a los internautas a sortearlo.

El régimen del presidente Xi Jinping se niega a reconocer la existencia de estos filtros, pero investigadores en el extranjero rastrearon los bloqueos a servidores dentro de China Telecom Ltd., de propiedad estatal y a través de la que debe pasar el tráfico de entrada y salida de internet en el país.

El ejecutivo promueve lo que llama “soberanía de internet”, o el derecho a que los líderes políticos limiten lo que su población ve online.

El espacio para el debate libre en línea “se ha reducido drásticamente” desde 2013, el año en que Xi se convirtió en presidente, explicó Emilie Frenkiel, profesora asociada de la Universidad París Este de Créteil, que investiga la participación y representación política en China. Pero añadió que la posibilidad de hablar abiertamente sobre temas delicados con otros chinos, como los taiwaneses, “aunque sea muy arriesgada, es tan rara que… muchos siguen dispuestos a aprovecharla”.

Una búsqueda de “Clubhouse invites”, que antes estaba a la venta en la tienda de apps de China, ya no da resultados.

Clubhouse ofreció temporalmente a los usuarios del gigante asiático un foro sin censura para abordar asuntos políticamente sensibles. Al contrario que muchas otras apps de redes sociales, emplea conversaciones orales, lo que permite que residentes en China puedan hablar directamente con otros en Taiwán, la isla autónoma reclamada por Beijing como parte de su territorio, y en otras partes del mundo.

Entre los asuntos discutidos recientemente estaban la región noroccidental de Xinjiang, donde el Partido Comunista ha internado a más de un millón de personas de etnia musulmana.

El servicio requiere que los usuarios sean invitados a entrar y que se identifiquen con su nombre y número de teléfono. Esto provocó advertencias de que los usuarios chinos podrían enfrentar represalias. No estuvo claro si alguien había sido castigado ya por emplear la app.

El partido gobernante bloquea también el acceso a Facebook, Twitter y a otras redes sociales internacionales, así como a miles de cibersitios gestionados por medios de comunicación y activistas en defensa de los derechos humanos, de Tíbet y de la democracia, entre otros.

(Con información de AP y AFP)

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