Así trabajó Didier Lobo desde el senado durante el 2020, año de la pandemia

 

 

 

Ya cerrando este año, el 2020, épocas de conclusiones e informes, miramos en retrospectiva, la gestión del senador por el partido Cambio Radical, Didier Lobo Chinchilla, en esta vigencia.

El recorrido de este año legislativo, lo iniciamos con una carta que el congresista cesarense, miembro de la Comisión Quinta, dirige al ministro de Trabajo, Ángel Custodio Cabrera, en la que le manifiesta su preocupación por el despedido masivo de trabajadores del sector minero en el departamento del Cesar. Esto, era apenas una señal del fuerte impacto social y económico que sobrevendría los meses siguientes y que inicialmente se mostró como el acatamiento de las normas dictadas por la OMS para enfrentar el estado de emergencia sanitaria, económica, social y ecológica que generaba la pandemia por el coronavirus, (Covid19).

Cómo respuesta, está la resolución 853 del 30 de marzo de 2020 que contempla un subsidio de emergencia como mecanismo de protección al cesante.
Esto nos ubica en el mes de marzo, ya el mundo tomaba medidas estrictas para evitar la propagación del virus que determinó cambios drásticos en las políticas ya establecidas. En Colombia, se estableció el aislamiento preventivo obligatorio, lo que afectó a varios sectores, el campo fue uno de los que recibió el mayor golpe.

La voz del senador Lobo Chinchilla se escuchó nuevamente, expresando su preocupación por los campesinos para quienes el gobierno anunció la línea de crédito ‘Colombia Agro Produce’ con $1,5 billones disponibles para productores del campo. Estos recursos suplirían lo necesario para las actividades productivas y el abastecimiento de alimentos a los colombianos durante esta crisis. Sin embargo, Didier Lobo detectó un inconveniente, una realidad que viven a diario los campesinos y pequeños agricultores, “según normas de bancos, esta parte de la población colombiana, no cumple con los requisitos para créditos y no tienen capacidad de endeudamiento”. Así se lo planteó al Ministro de Agricultura, Rodolfo Zea Naranjo, a quien solicitó: “Una ayuda directa para ellos”. De esta forma, obtuvo respuesta, la modificación del artículo 2 de la Ley 302 de 1996, para agregar la actual Declaratoria de Estado de Emergencia Económica, Social y Ecológica con lo que pequeños y medianos productores afectados por la crisis, tendrían atención del Fondo de Solidaridad Agropecuario (FONSA). Para Lobo Chinchilla, el Gobierno debía facilitar mecanismos financieros más asequibles dirigidos al productor del campo, a los más vulnerables.

En su calidad de ponente en el proyecto de ley Reforma al Sistema General de Regalías, el congresista, como defensor de los derechos e intereses de los productores de recursos naturales no renovables en el país, celebró que con este avance se hace justicia devolviéndole parte importante a estos productores, y se garantiza asignación a los no productores, orientado a los que tienen más necesidades básicas. Dentro del impacto de esta reforma al SGR, está el aumento de recursos para las regiones productoras, las asignaciones directas pasarán del 11% al 25%. El Cesar pasará de recibir $230.000 millones a una asignación de más de $500.000 millones.

Para el periodo bianual los municipios y departamentos del país tendrán más de $15,7 billones para inversiones en vías terciarias, electrificación rural, sector agropecuario, conectividad, agua potable y saneamiento básico. De igual manera se destaca la verdadera regionalización de los recursos del SGR por la inclusión de la mayoría de las regiones en la Comisión rectora y pocos OCAD que subsisten. Además las autoridades locales no estarán solas como en el pasado, pues tendrán acompañamiento de Asocapitales y la Federación Colombiana de departamentos y municipios. Asimismo, la reforma al SGR contempla el respeto por la consulta previa, comunidades étnicas con autonomía en sus recursos y con presencia activa en los OCAD regionales.

Y correspondiendo al régimen de su comisión, la Quinta, y atendiendo los centenares de quejas de los usuarios, el senador Lobo Chinchilla sentó posición en contra de Electricaribe. Y, tras lo que calificaron como un logro que beneficia a más de 10 millones de habitantes de la Región Caribe, reconoció la labor del equipo de gobierno ante la llegada del nuevo operador de energía en esta zona del país, en coordinación con alcaldes, gobernadores, congresistas y líderes de las regiones. “No fue fácil, un proceso arduo en el que encontrar la solución era lo fundamental para los habitantes de la costa quienes ahora esperan un excelente servicio, buenas tarifas y visibilidad de las inversiones”, dijo.

Transcurría el primer semestre del 2020, la virtualidad tomaba una relevancia tan inesperada en todos los sectores como las consecuencias del Covid19, el legislativo no era la excepción. El Gobierno Nacional buscaba fórmulas, inmediatas, para mitigar la arremetida por la declaratoria de Emergencia Sanitaria en acato a directrices de la Organización Mundial de la Salud, OMS, que se tradujo en un aislamiento social que ya cumplía varias semanas. Ante este panorama, Lobo Chinchilla alentó al presidente de la República, Iván Duque; al ministro de Salud, Fernando Ruiz, y demás carteras a seguir adelante con la implementación de medidas que, según estadísticas, arrojaban buen resultado.

“Reconocer el esfuerzo que a través de medidas se ha hecho desde el Ministerio de Salud no es felicitarlos, es decirles que pueden contar con mi apoyo como senador, y con el respaldo del partido (Cambio Radical). Esta crisis ha exigido trabajar sobre la marcha, y por supuesto, las falencias son parte del proceso, lo que corresponde ante estas, es mejorar”, expresó Lobo Chinchilla en ese momento a la vez que exigió, “más efectividad y oportunidad en la materialización de los beneficios decretados para atender a las comunidades más golpeadas por la crisis”.

Uno de los puntos, que consideró Lobo Chinchilla, no daba compás de espera, fue el tema de la contratación de los trabajadores del sector de la salud y destacó que el pago a quienes ocupaban la primera línea enfrentando la batalla contra el Covid-19, debía ser de inmediato. Al igual que la dotación de los elementos de bioseguridad para el desarrollo de sus funciones, en las que no solo exponen sus vidas, también las de sus familias”.

Cuestionó a las EPS por la demora y falta de pago a las IPS obstaculizando el pago a los trabajadores de la salud. Didier Lobo, planteó en ese momento de zozobra, mitigar el impacto del Covid-19 en Colombia, creando un canal de atención a través de una plataforma del Departamento Nacional de Planeación, DNP, para trabajadores independientes, preferiblemente exclusivo para este sector, con el fin de que estos puedan ser evaluados, y así ser tenidos en cuentas, si califican, para recibir las ayudas solidarias durante la crisis, por supuesto, previa bancarización.

Pero conectarse era privilegio de algunos sectores, en los que no entraba la parte rural del país. Y sobre esto, el congresistas cesarense expuso el tema: “la conectividad es muy difícil en muchas partes del territorio nacional, la participación virtual no representa la mayoría de los sectores que hoy se ven afectados, sobre todo en la parte rural, la parte donde están las fuentes hídricas o donde están las mayores afectaciones”. Refiriéndose a la pandemia. Y soportando su argumento, mostró las estadísticas del Dane sobre la falta de garantías en la conectividad, también reflejada en el sector de la educación: Para el 2018 el 50% de los hogares colombianos no tenía internet, apenas el 29% de los hogares en el país tenían portátil, el 21% un computador de mesa, y el 11% una Tablet. Así mismo solo el 25% de las personas en centros poblados y rurales dispersos usó computador y sólo el 36% usó internet en cualquier lugar.

Los músicos, otro sector que impactó fuertemente la pandemia, ocupó la agenda del senador Lobo, “Y, no me refiero a los grandes y famosos”, precisó, “sino a los tradicionales, aquellos que viven del toque y su situación es difícil debido a las restricciones para su actividad, lo que limita o anula sus ingresos impactando su calidad de vida”.
De esta manera, Didier Lobo, instó a la ministra de Cultura, Carmen Vásquez, a buscar alternativas para apaciguar el impacto de la crisis en el sector que cubre su cartera, la cultura, especialmente el gremio de músicos, enfatizando en los de los departamentos del Cesar y La Guajira. Líneas de créditos, en este punto, el senador precisó que no se puede incluir a los músicos en una misma bolsa, debido que entre ellos, un porcentaje pequeño son empresarios y propietarios de las agrupaciones que pueden tener acceso a créditos en los bancos, con los alivios respectivos entre estos un tiempo de gracia. Para los músicos que viven del toque diario, y que generalmente, no cumplen con los requisitos para un crédito bancario, Lobo pidió auxilios económicos, con suma urgencia.

El senador Didier Lobo continúa trabajando desde el Congreso de la República por los sectores más vulnerables. Su compromiso con sectores como el rural, el minero entre otros es la esencia de su gestión legislativa.