Polémica en El Copey por sepelio de cadáver con presunto Covid-19

En el municipio de El Copey se generó una polémica, cuando se disponían a sepultar a un hombre que falleció presuntamente por estar contagiado por Covid-19. La situación generó polémica en cuanto a la disposición de cadáveres infectados por el virus, pues la Alcaldía tiene prohibido los entierros en el cementerio central y los envía al nuevo camposanto donde está dispuesto un espacio para estos casos por la emergencia que se vive por la pandemia.

“Como un perro pretendían enterrar a nuestro pariente, el nuevo cementerio de El Copey no está funcionando, es un terreno enmontado y justo cuando llevamos el cadáver estaba una máquina limpiando el espacio donde enterrarían a mi hijo”, manifestó Elvia Rosa García, madre de crianza de Luis Alberto Pacheco Ortiz, de 42 años, de quien aseguran murió por problemas pulmonares y la Administración Municipal lo registra como Covid-19.

Explicó que cuando lo fueron a sepultar en el cementerio central de El Copey, al principio no lo dejaron porque el alcalde, Francisco Meza Altamar, dio la orden de no permitir entierros de personas contagiadas por Covid-19. Fueron varias horas de agonía, mientras el cadáver los trasladaban de un lado a otro hasta que se logró la sepultura en el cementerio central en horas de la tarde del domingo.

“Luis Alberto murió fue por una infección pulmonar, ya que mató dos cerdos y luego se mojó con agua de lluvia. Él se resfrió y se complicó; mi hijo no murió por Covid-19, como lo han querido dar a entender en una clínica del municipio de Bosconia, donde fue atendido”, dijo Eduardo Rafael Pacheco, padre del hombre fallecido.

Explicó que cuando la carroza fúnebre llevó el cuerpo, el sepulturero no dejó entrar el ataúd y los mandó para el supuesto cementerio nuevo que no tiene encerramiento y es una zona enmontada. En el lugar, se presentó un enfrentamiento entre parientes y trabajadores del camposanto y finalmente el cadáver fue devuelto hasta la el cementerio central donde finalmente recibió cristiana sepultura.

LA ALCALDÍA ACTUARÁ

A través de la Secretaría de Salud Municipal, la Alcaldía de El Copey respondió a la polémica que se ha originado alrededor del fallecimiento del señor Luis Alberto Pacheco Ortiz, el cual se dio en el municipio de Bosconia, Cesar, el día 26 de julio, por Covid-19.

Aclaró que el Ministerio de Salud y Protección Social son precisos al decir que: la disposición final de cadáveres de personas fallecidas asociadas a Covid-19 se dará por cremación o inhumación en sepultura o bóveda individualizada.

En el caso de Luis Alberto Pacheco, los familiares dieron aviso a la Secretaría de Salud municipal del fallecimiento, en la clínica Sinai Vitais de Bosconia, con el fin de solicitar el traslado del cuerpo para ser sepultado en El Copey. Autorización que fue remitida a autoridades de la Policía Nacional.

La Secretaría de Salud manifestó que el traslado del cuerpo era posible siempre y cuando se cumpliera con los lineamientos establecidos por el Ministerio de Salud y Protección Social. Fue autorizado bajo la responsabilidad de la Funeraria Capillas de la Fe, la cual envió oficio a la sectorial de Salud del municipio detallando la ruta de inhumación del cadáver. La respuesta de la secretaría fue positiva y respondida vía correo electrónico.

De inmediato se les explicó a familiares del fallecido las razones por las que el cuerpo del señor Luis Alberto Pacheco Ortiz debía ser sepultado en el lugar donde se organiza el cementerio Covid del municipio, las cuales fueron recibidas sin objeción alguna. Sin embargo, al llegar el cuerpo al municipio de El Copey, los familiares desatendieron las instrucciones dadas por la Secretaría de Salud y terminaron sepultando al paciente en el cementerio central.

En tal sentido, la Alcaldía iniciará las indagaciones preliminares para determinar el grado de responsabilidad por incumplimiento a las instrucciones y protocolo de bioseguridad dado desde el orden nacional para el tratamiento de fallecidos por Covid-19, contra la funeraria Capillas de la Fe y los familiares del fallecido.