7 de septiembre , 2024
Nacional

Militares veteranos enfrentaron al ministro de Defensa en medio de su rendición de cuentas

Iván Velásquez, ministro de Defensa de Colombia, experimentó un momento complicado durante la presentación de la rendición de cuentas de los dos años del gobierno de Gustavo Petro.

Al destacar cifras positivas de seguridad, algunos miembros del público, identificados como representantes de veteranos militares, se levantaron para protestar contra el convenio que permite que desmovilizados con discapacidad de la guerrilla de las Farc sean atendidos en el Hospital Militar.

Durante el evento en cuestión, los manifestantes se expresaron con pancartas y gritos como “Respete a la Fuerza Pública”, instando al ministro a reconsiderar el acuerdo.

Según Semana, Velásquez trató de calmar la situación elevando la voz y enfatizando que el convenio busca construir “un país más solidario”, aprovechando la experiencia del Hospital Militar en casos de discapacidad.

El convenio en mención ha sido fuente de acalorada controversia en Colombia. Meses atrás, surgió una fuerte polémica tras conocerse que el Ministerio de Defensa había firmado el acuerdo para brindar atención a más de mil excombatientes de las Farc con discapacidades resultantes del conflicto armado.

Este acuerdo fue justificado por Velásquez en términos de equiparar el conocimiento y la capacidad del Hospital Militar para tratar a los desmovilizados con necesidades especiales derivadas del conflicto.

Red+ Noticias también reportó el incidente, destacando que los veteranos de las Fuerzas Militares interrumpieron la ceremonia, exigiendo que los firmantes del acuerdo de paz de las Farc no sean atendidos en el Hospital Militar. Esta cobertura refleja la profunda división y el descontento entre ciertos sectores de las Fuerzas Armadas respecto al tratamiento igualitario de aquellos que en el pasado se enfrentaron en el campo de batalla.

La manifestación durante el evento ilustra la dura realidad de un país que intenta sanar las profundas cicatrices de un conflicto armado que duró más de cinco décadas. El acuerdo para atender a exguerrilleros en el Hospital Militar puede ser visto como un paso hacia la reconciliación y la integración, pero también resalta las tensiones persistentes entre los veteranos y la administración del nuevo gobierno.

Gustavo Petro, quien asumió la presidencia, enfrenta desafíos significativos para implementar su visión en un país consciente de su historia de violencia. La decisión de integrar a los excombatientes en los sistemas de salud y reincorporación es una extensión de esta visión, alineada con otros esfuerzos de paz y reconciliación en Colombia.

Durante sus declaraciones, Iván Velásquez argumentó que la experiencia del Hospital Militar es invaluable para abordar los desafíos específicos que enfrentan aquellos desplazados y heridos durante el conflicto. Al proporcionar acceso a servicios de salud a los desmovilizados, el gobierno busca facilitar su reintegración y asegurar una transición más suave hacia una paz duradera.

En contraste con esta postura, algunos críticos dentro de las Fuerzas Armadas y veteranos consideran que tal acceso de los exguerrilleros al Hospital Militar es una afrenta a su sacrificio y servicio. Estos detractores argumentan que los recursos y la atención deberían ser reservados exclusivamente para los miembros de las Fuerzas Armadas y sus familias, en reconocimiento a su lealtad y sacrificio por el país.

La política de buena fe del gobierno de Petro continúa enfrentándose a la oposición de aquellos que ven los acuerdos de paz y los esfuerzos de reconciliación bajo una luz diferente. Mientras muchos abogan por seguir adelante y cerrar las heridas del pasado mediante la inclusión y la equidad, otros se mantienen firmemente atrincherados en la defensa de las percepciones tradicionales de justicia y retribución.

El desafío para Velásquez y el gobierno de Petro radica en navegar estas aguas turbias y encontrar un equilibrio que respete las sensibilidades y sacrificios de las Fuerzas Armadas sin renunciar al compromiso con la reconciliación y la paz sostenible. Con Infobae

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