Así extorsionan los Costeños a las estaciones de gasolina en Barranquilla
El viernes 5 de abril fue capturado en Barranquilla Wilson Alfonso Luna Pérez, alias Cocuán, un sicario y extorsionista de los Costeños acusado de asesinar al trabajador de una estación de gasolina por no pagar una ‘vacuna’.
En medio de las audiencias de legalización de captura e imputación de cargos, la Fiscalía reveló testimonios de testigos, análisis balístico, y registros fotográficos y de videos, que dan cuenta de la forma de extorsionar del grupo criminal comandado por Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor.
La víctima mortal fue identificada como Jorge Armando Molinares Malvido, que fue acribillado a tiros en octubre de 2023 en su puesto de trabajo, hasta donde Cocuán llegó en moto con otro cómplice a cobrar una extorsión.
En medio de la audiencia ante el juez 14 Penal Municipal con funciones de control de garantías, el fiscal a cargo del caso expuso los detalles de los eventos sucedidos el 25 de octubre de 2023. En el material probatorio expuesto se describió cómo Molinares Malvido cumplía con su horario laboral en la Estación de Servicio San Antonio, en el suroriente de Barranquilla, cuando fue abordado y posteriormente atacado con disparos por Luna Pérez y un acompañante.
Un testigo específico detalló que la víctima intentó resistirse a la demanda de dinero, momento en el cual uno de los agresores le amenazó con dispararle si no accedía a entregar el monto solicitado.
“Un testigo presencial señaló que la víctima forcejeó con las dos personas. Incluso, escuchó cuando uno de estos le dijo: entrega la plata, ¿te vas a hacer matar?… Esa misma persona también expresó: ¿tú crees que esta arma es de mentira?…te voy a pegar tu tiro y luego disparó”, indicó la Fiscalía.
De acuerdo con la investigación, el motivo del ataque surgió de una exigencia de pago por parte de los agresores, relacionada presuntamente con extorsiones previas efectuadas desde prisión por dos líderes de ‘los Costeños’, identificados bajo los alias de Ojeda y Cachete.
A raíz del ataque, Molinares Malvido fue trasladado primero al centro de salud Camino Adela de Char, y posteriormente al Hospital General de Barranquilla, donde falleció algunas horas después debido a las graves heridas recibidas.
La fiscalía también destacó que alias Cocuán, oriundo de Santa Catalina (Bolívar), pudo ser identificado gracias a descripciones de sus tatuajes, reconocidos por los testigos durante sus declaraciones.
Al concluir la imputación de cargos, Luna Pérez se negó a aceptar los cargos imputados, que incluyen homicidio agravado y porte ilegal de arma de fuego. En respuesta, el juez presidiendo el caso decretó su traslado a un establecimiento penitenciario, donde permanecerá detenido mientras avanza el proceso judicial.
Según la Policía Metropolitana de Barranquilla, la muerte del trabajador de la estación de gasolina sirvió de ‘escarmiento’ para que las demás comercializadoras de combustible no se resistieran a los cobros extorsivos; además, Cocuán se habría convertido en uno de los principales cobradores de extorsiones en la capital del Atlántico por su amplio prontuario criminal, que infundía terror en los barrios de Montes, San José, Chiquinquirá, San Roque y en el centro de la ciudad.
Ante las intimidaciones de Cocuán y otros criminales de los Costeños, las estaciones de gasolina de Barranquilla decidieron atender solo de día y tuvieron que recibir apoyo policial y del Ejército, que patrullaban constantemente en las estaciones para evitar que siguieran atentando contra la vida de los trabajadores.
Alias Cocuán fue trasladado a la Cárcel Distrital del Bosque en Barranquilla, después de que se negara a aceptar los cargos imputados por homicidio agravado y por fabricación, tráfico y porte ilegal de armas de fuego o municiones, por orden del juez de control de garantías del Juzgado 14 Penal Municipal de Barranquilla. Con Infobar