Bajos niveles en el Embalse Betania y otras represas pone en riesgo la energía del país
El Embalse Betania, una fuente crucial de generación eléctrica y seguridad alimentaria en el departamento del Huila, se encuentra en grave peligro. Los bajos niveles del embalse y la alta mortandad de peces están generando una crisis que demanda atención inmediata.
Así lo considera la Procuraduría General de la Nación, que elevó la voz de alarma al Gobierno Nacional y a las autoridades locales, exigiendo medidas urgentes para enfrentar esta emergencia.
Ubicado en el departamento del Huila, el Embalse Betania desempeña un papel esencial en la generación de energía eléctrica y la producción de alimentos en la región. Este cuerpo de agua no solo abastece de electricidad a muchas ciudades del país, sino que también actúa como un recurso vital para la piscicultura, alimentando a la población con especies como la tilapia roja y negra.
La Procuraduría General de la Nación ha elevado una voz de alerta, señalando que el fenómeno de El Niño y las acciones realizadas para mantener la generación eléctrica han llevado a una disminución preocupante en los niveles del embalse. La demanda energética en el país ha llevado al administrador del Sistema Interconectado Nacional (SIN), XM, a solicitar una generación más alta en la Central Hidroeléctrica de Betania. Esto ha generado una reducción significativa en los volúmenes del embalse.
La preocupación por el Embalse Betania solo es una ejemplificación de un problema mayor, conocido como crisis energética.
La alerta de una posible crisis energética en Colombia ha generado una movilización de diferentes sectores, desde gremios hasta empresas y el Gobierno Nacional, que trabajan en conjunto para evitar que la situación empeore. No obstante, se ha revelado que más de 36 comercializadoras de energía corren riesgo financiero, lo que representa el 38 % de la generación de energía del país.
El exministro de Minas y Energía, Diego Mesa, ha subrayado la complejidad de la situación en el sector eléctrico. En este contexto, Natalia Gutiérrez, presidenta de la Asociación Colombiana de Generadores de Energía Eléctrica (Acolgen), destacó los riesgos a los que se enfrenta actualmente el sector eléctrico
Natalia Gutiérrez, presidenta de Acolgen, ha alertado sobre la situación de los embalses en Colombia. Según Gutiérrez, los embalses se encuentran en un preocupante 72,8 % de su capacidad, lo que significa que el país tiene reservas de agua para aproximadamente 2,5 meses si la sequía persiste o si no se activan las centrales térmicas.
Esta cifra es especialmente alarmante si se considera que hace un mes estábamos por encima del 80 % de capacidad. El nivel útil de los embalses se está agotando rápidamente, y esto se debe a un gasto excesivo de agua en comparación con la recarga de los embalses.
Gutiérrez también ha destacado la creciente dependencia de las centrales térmicas en Colombia. En la actualidad, estas centrales aportan aproximadamente el 40 % de la energía consumida en el país, lo que equivale a 89.5 GWh.
El restante 60 % del suministro eléctrico aún proviene de fuentes hídricas. El aumento en la generación termoeléctrica es una respuesta a la disminución en los niveles de agua en los embalses y a la necesidad de garantizar el suministro energético.
El exministro de Minas y Energía, Diego Mesa, ha respaldado la preocupación de Acolgen sobre la situación del sector eléctrico colombiano. Mesa ha señalado que la situación es compleja y que se requieren medidas contundentes para abordar los riesgos financieros que enfrentan las comercializadoras de energía. Esta es una llamada de atención a la necesidad de tomar acciones decididas para evitar una crisis energética a gran escala en el país.
La creciente dependencia de las centrales térmicas, la disminución de los niveles de agua en los embalses y la amenaza del Fenómeno del Niño representan amenazas significativas para la estabilidad del suministro eléctrico en Colombia. Estos desafíos exigen una respuesta coordinada y eficaz por parte de las autoridades, las empresas del sector y la población en general, según explica el mismo Mesa. Con Infobae