Valledupar está de moda, se mueve entre el deporte y el turismo
Capital del vallenato, tierra de música y cantores, naturaleza y cultura, son algunos de los calificativos de la tierra del Cacique Upar, Valledupar, que hoy se convierte en el centro de atención en el país y el mundo con la realización de los XIX Juegos Bolivarianos, evento que además de traer deporte, genera turismo y reactiva la economía.
Sus calles están repletas de visitantes, sus monumentos el mejor espacio para llevarse la fotografía del recuerdo, sin dejar a un lado sus sitios históricos y culturales que marcan su sello en cualquier parte del mundo.
La caja, guacharaca y acordeón, son hoy su carta de presentación para los más de 3.000 atletas que visitan la ciudad provenientes de Venezuela, Panamá, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile, Guatemala, El Salvador, Paraguay y República Dominicana. Además de familiares, técnicos y delegaciones que hoy engalanan esta tierra.
Sin dudas, Valledupar está de moda, su reactivación económica ha sido inminente con la realización de las justas bolivarianas, que además de traer alegrías, ha permitido generar empleo y mostrar la vitrina turística de esta noble tierra.
‘NO ME VOY SIN VISITAR EL MONUMENTO DE DIOMESES’
Impresionado y alegre, casi de vellos erizados, se encontraba en la Villa Deportiva Bolivariana Anselmo Acosta Velarde, miembro de la delegación de Perú, durante el acto de bienvenida de las delegaciones, donde la cultura vallenata se vivió a flor de piel.
“La primera referencia que tuve de la sede de los juegos, es que es una ciudad colorida, llena de música, tradiciones y un amor inmenso por el vallenato, y pues no me equivoqué. Desde que llegamos no han hecho más que mostrarnos sus bellezas, es muy emocionante; así como estuvo el acto inaugural donde nos enseñaron una leyenda incomparable; nos han recibido a la altura y esto garantizará el éxito de las justas”, manifestó mientras observaba el baile de las piloneras.
Lo que sí dejó claro Acosta Velarde, es que no se irá de esta tierra sin antes llevarse la foto del recuerdo que todo el mundo quiere, al lado de la estatua de Diomedes Díaz y su hijo Martín Elías. “Esas esculturas son referencia en cualquier rincón del mundo, y yo me las llevaré para decir con orgullo que estuve en Valledupar, la tierra del vallenato”, dijo entre risas.
La capital del Cesar, en estos doce días de competencias, muestra sus mejores lugares, su gastronomía y el encanto de sus cantos vallenatos. Por ello tiene dispuesto una amplia gama de servicios y sitios turísticos para el disfrute de todos.
La plaza Alfonso López es el principal atractivo del centro histórico de la ciudad, es el templo sagrado del Festival Vallenato, donde se rinde homenaje perpetuo a este folclor. Está rodeada por más de 300 trinitarias, cuyas flores adornan el pasado y el presente de esta ciudad, mientras que el carril central de los espacios, están reflejadas las siete etnias indígenas de la región, seguidas de una silueta curva que simbolizan las ondas de las aguas del río Guatapurí, afluente que marca los orígenes de esta ciudad.
SUS ESCULTURAS Y RÍOS
Valledupar está bordeada de esculturas y monumentos de destacados exponentes vallenatos. Desde ‘Las Piloneras’, ‘Mi Pedazo de Acordeón’, ‘Los Poporos’, ‘La Sirena de Hurtado’, entre otros, se puede recorrer la historia de Valledupar.
A estas se le suman las esculturas talladas a escala natural como la de Diomedes Díaz y su hijo Martín Elías, Leandro Díaz, Carlos Vives, Jorge Oñate, Iván Villazón, Kaleth Morales, ubicadas en el Parque La Provincia, otro sitio representativo de la ciudad.
La naturaleza es otro don que envuelve a la capital del Cesar. Las cálidas temperaturas que arropan a Valledupar incitan al disfrute de sus ríos, quebradas y otras fuentes hidrográficas que lo bordean de punta a punta.
El río Guatapurí con sus aguas frías y piedras rocosas, atraen a propios y visitantes. Hasta la Sierra Nevada de Santa Marta, las aguas de los balnearios de La Mina y El Mojao, dan vida a los corregimientos de Río Seco, Badillo, La Vega y Atánquez, lugares también cargados de historia y esplendor.
SIN DUDA RENACE VALLEDUPAR
La Secretaría de Desarrollo Económico, Turismo y Medio Ambiente, Emma Carrascal, manifestó que la ciudad renació luego de dos años de estancamiento a causa de la pandemia. Su color, su luz y su potencial cultural vuelven a revivir en el país y el mundo, sobre todo en este momento que la ciudad es el epicentro deportivo más importante para once países que participan.
Por ello no se perderá la oportunidad de mostrar el valor de su gente y su capacidad de salir adelante, aún en los tiempos adversos. Los días 2 y 3 de julio se llevará a cabo la segunda Feria de Emprendimiento, Cultura y Turismo en el centro histórico de la ciudad, donde más de 300 emprendedores podrán ofertar sus productos ante propios y visitantes de una forma integrada y dinámica en el Viejo Valledupar.
La Organización Deportiva Bolivariana, Odebo, ha manifestado que la cultura es el ‘gancho’ de la ciudad para atraer turistas y llenar de alegría a más de 3.000 atletas que la visitan.
Por su parte, el alcalde de Valledupar, Mello Castro, reafirmó que este es el año de Valledupar y de su ciudadanía. Los Juegos Bolivarianos significan un antes y un después para la ciudad en materia deportiva, generación de empleos y consolida la dinámica de muchos sectores.
“Ha sido un gran esfuerzo que hoy arroja resultados importantes, un sueño hecho realidad que proyecta a mi ciudad ante Colombia y el mundo. Estamos listos para que el deporte se haga leyenda”, dijo.
