Indígenas en minga permanente por libertad de su Cacique

La detención y condena del Cacique Mayor Regional del Pueblo Zenú, Eder Eduardo Espitia Estrada, ha causado conmoción entre los pueblos indígenas, cuyos miembros protestaron este miércoles, frente al Establecimiento de Máxima y Mediana Seguridad de Valledupar, conocido como ‘La Tramacúa’, donde permanece su líder a quien consideran se le han violado sus derechos a la autonomía, territorio y espiritualidad.

Liderados por los guardias indígenas, la protesta estuvo apoyada por integrante de los pueblos yukpa, wayúu, kankuamo, wiwa y zenú, del Cesar, La Guajira y Córdoba; además de los arhuacos, quienes han cedido su territorio para estar en minga permanente hasta que se le de la libertad de su líder.

Desde Córdoba y Sucre las autoridades del pueblo Zenú se movilizaron hasta Valledupar, para requerir al Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, el respeto por las autoridades propias y legitimas de los indígenas y la libertad de su cacique Eder Eduardo Espitia Estrada, quien el 10 de junio del 2022 es retenido de forma ilegal por miembros del CTI y los denominados ‘Abuelos Sabedores’.

Sobre este grupo aseguran que no constituyen un órgano de aplicación de justicia del Pueblo Zenú. “Esto constituye un acto de usurpación de funciones promovido y apoyado por las Instituciones del Estado, representadas en el INPEC y la Fiscalía General de la Nación.

“Las Autoridades Indígenas Zenú de Córdoba y Sucre, en el marco de nuestra autonomía, denunciamos la inexistencia y nulidad del documento denominado “Mandato N°01 del 31 de enero de 2022, por no haber sido emitido por las autoridades legítimas del Pueblo Zenú, y declaramos que la figura ‘abuelos sabedores’ es una suplantación de las Estructura de Gobierno y Justicia del Pueblo Zenú; por tanto, el mandato no tienen valor jurídico, ni pueden considerarse válidos a la luz de la Ley de Gobierno Propio del Pueblo Indígena Zenú y del Ordenamiento Jurídico Colombiano”, manifestó René Hernández Santos, representante del pueblo Zenú.

Agregó que desde Córdoba y Sucre llegaron a apoyar a su líder en nombre de las 284 comunidades indígenas. La detención se dio por un conflicto interno entre los pueblos, cuya extensión del mandato es una decisión de los pueblos, de las autoridades y comunidades.

Esneda Saavedra Restrepo, consejera de Derechos Humanos del pueblo yukpa, dijo que el caso ha conmovido al movimiento indígena en general porque le han violado sus derechos a su territorio, a su autonomía y a su espiritualidad, por el cual se ha venido luchando por el poco respeto por parte del Gobierno nacional.

“Tenemos nuestra propia justicia, la ley de origen que el Gobierno no reconoce. Es una autoridad indígena que está detenida por la justicia ordinaria, hoy responsabilizamos al Ministerio del Interior, Ministro de Defensa, Fiscalía y la Sijin por desconocer el gobierno propio. Si el Cacique fuera un delincuente, aquí no estaríamos ofreciéndole el apoyo y defendiendo sus derechos como indígena”.

“Alertamos y convocamos a la solidaridad de las Organizaciones Indígenas Locales, Regionales y Nacionales a pronunciarse ante la inseguridad jurídica y el riesgo que representa para el Movimiento Indígena Colombiano y la Jurisdicción Especial Indígena, la detención ilegal de nuestra Autoridad Mayor en un centro de detención del INPEC, por parte de suplantadores de la autoridad legítima, reiteró Yainis Isabel Contreras Jiménez, indígena Zenú, quien agregó que el CTI se metió arbitrariamente al territorio, pero se defenderá la autonomía de los pueblos hasta el final de esta lucha.