Cuáles son las señales y los riesgos de la neumonía bilateral, el síntoma más grave de COVID-19

Según especialistas en la materia, la neumonía bilateral es el síntoma más grave de COVID-19 y una de las complicaciones más frecuentes. ¿Cuáles son las señales, los riesgos y los tratamientos frente al desarrollo de este cuadro?

Antes de la pandemia de COVID-19, la neumonía era (y sigue siendo) una enfermedad causada por bacterias o virus como la influenza. Estos agentes patógenos se propagan por grandes regiones del pulmón en cuestión de horas, aunque pueden ser controlados por antibióticos o por el mismo sistema inmunológico del cuerpo en los primeros días de la enfermedad. Sin embargo, la neumonía por coronavirus SARS-CoV-2 es notoria por sus diferencias.

En lugar de infectar con rapidez grandes regiones del pulmón, el coronavirus se toma su tiempo para instalarse en varias zonas pequeñas del pulmón. Acto seguido, toma control de las células inmunes de los pulmones y las utiliza para propagarse durante un largo periodo de días o incluso semanas. Los pulmones se inflaman y se debilitan y, a medida en que la infección se mueve lentamente de forma bilateral, ésta deja daños a su paso. La severidad ya depende del compromiso pulmonar y esto se refleja en la fiebre, la baja presión sanguínea y los daños en diversos órganos del cuerpo, incluyendo los riñones, el cerebro y el corazón.

Arnaldo Casiró, jefe de Infectología del Hospital Álvarez, en Argentina, respondió a una serie de dudas comunes presentadas por Clarín sobre los cuadros que desarrollan neumonía bilateral, y qué se debe hacer al respecto:

“El riesgo más importante tiene que ver con la pérdida progresiva y a veces muy rápida de la capacidad pulmonar. Esto puede llevar a que la persona requiera oxígeno y, en los casos más difíciles, cuando el oxígeno no es suficiente, puede que se decida llevar al paciente a un coma farmacológico e intubarlo hasta que logre superar la neumonía”.

El doctor Casiró dice que las señales más comunes de neumonía bilateral son “la fiebre y la tos o falta de aire” y también hay signos indirectos que se deben tomar en cuenta el dolor de espalda. En la medición del oxímetro, basta con tener 95 por ciento o menos para avisar al médico. En caso de ser detectado hay que actuar rápido, ya que hay riesgo de que el cuadro empeore en 48 horas.

“Varía mucho según el paciente”, indica el especialista acerca del tiempo de curación. “Hay cuadros moderados que tienen el alta entre los cinco y siete días. En tanto, algunos graves pueden estar hasta tres meses en terapia intensiva”.

Es común que la neumonía bilateral deje secuelas, aunque “es algo transitorio que se corrige con rehabilitación pulmonar”, dijo. “Las secuelas pueden ser más complejas en pacientes que tuvieron que ser intubados. Uno de los casos más severos tiene que ver con la fibrosis pulmonar”.

“Es importante visitar a un neumonólogo, un cardiólogo y un clínico después de sufrir covid para chequear si quedaron secuelas y, en los casos en los que resulte necesario, iniciar una terapia de recuperación.

El doctor Casiró recomendó la vacunación a la población general, ya que la vacuna reduce enormemente las probabilidades de padecer síntomas graves de covid, incluyendo neumonía:

La vacuna “ayuda a prevenir la enfermedad grave y la muerte por coronavirus. La neumonía es una de las complicaciones sobre las que impacta. Los anticuerpos empiezan a generarse tres semanas después de la primera dosis. La segunda actúa como refuerzo para aumentar la cantidad de anticuerpos y extender su duración”.

En caso de no estar vacunadas aún, las personas más susceptibles a manifestar una neumonía bilateral son aquellas con “patologías respiratorias preexistentes como EPOC y asma grave. También puede manifestarse con más frecuencia en fumadores, pacientes diabéticos y personas con obesidad”.

La neumonía bilateral es una enfermedad que requiere internación y oxígeno administrado por mascarilla o bigotera. También:

“Se suele tratar con corticoides y con anticoagulantes. En algunos centros también se utiliza el suero hiperinmune equino. Existen protocolos de investigación. Entre ellos, con anticuerpos monoclonales y medicamentos que están aprobados para patologías oncológicas y reumatológicas”.