Uribe replica duramente a Petro por sugerir que se podía someter a la JEP

Airadamente el expresidente Álvaro Uribe Vélez reaccionó este martes a la sugerencia de que se someta a la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, que le hizo el presidente Gustavo Petro, tras el fallo de la jueza 44 Penal del Circuito de Bogotá que lo declaró culpable de los delitos de soborno en actuación penal y fraude procesal y que lo puso a las puertas de la cárcel.
Al respecto, el jefe del Estado, en su cuenta en X, hizo primero una extensa reseña del paramilitarismo, la cual comenzó citando la creación del bloque Metro en Antioquia, resaltando sus debates de control político junto con Iván Cépeda en el Senado y puso de presente que por el caso de falsificación de testigos fue víctima, pero no judicializó.
Posteriormente se refirió al grupo paramilitar conocido como «los 12 apóstoles» y subrayó que «es un tema de esclarecimiento judicial cuyo juez competente es la Justicia Especial de Paz, tribunal de cierre de la justicia de paz según los acuerdos firmados por el presidente Santos y las Farc, hoy, declaración unilateral de estado ante la ONU».
Añadió que siempre ha solicitado a la Corte Constitucional, «cumplir el acuerdo de paz y permitir la acción plena de la JEP incluso, con el sometimiento de narcotraficantes» y puntualizó:
«A la JEP puede ir Uribe Vélez y entregar a Colombia una verdad que, aunque dolorosa, puede ayudar a salir definitivamente de la violencia».
Frente a estas precisiones la respuesta del expresidente Uribe Vélez fue contundente:
A continuación transcribimos el texto integral del escrito del presidente Gustavo Petro que causó la airada reacción de Uribe Vélez:
«El tema central de la investigación es cómo se fundó el bloque Metro de los paramilitares de Antioquia y por qué lo exterminaron los mismos paramilitares
Fué parte de mi debate del año 2007 sobre el paramilitarismo en Antioquia, que aún esta en Youtube, y sobre el que espero colaboración para su publicación, y que continuó con mayor profundidad, Ivan Cepeda, ambos como congresistas y en nuestra función constitucional del control político
El bloque metro se negó a narcotraficar y buscó ser una simple fuerza antinsurgente con apoyo estatal.
Mi familia desde mi debate tuvo que exiliarse. Iván fue presa de persecusión tambien, buscando judicializarlo de diferentes formas, hasta que magistrados de la corte encontraron indicios de falsificación de testigos, varios de esos testigos habían actuado en mi contra acusándome de prometer cheques a cambio de información, y la Corte Suprema me exoneró en varios procesos por la falsedad de los testigos, nunca supe quien les pagaba a ellos para acusarme, hasta que yo mismo, como congresista, descubrí que el mismo DAS, inteligencia adscrita a la presidencia, estaba persiguiéndone inconstitucional e ilegalmente, a mi y a decenas de opositores, jueces y periodistas.
En el caso de Iván Cepeda acusado en la Corte, tambien como yo, si se descubrieron indicios sobre los nombres de quienes pagaban a los falsos testigos, y se inicio el proceso contra el expresidente Alvaro Uribe y se exoneró al senador Iván Cepeda.
La renuncia del senador Uribe a su curul, estando yo allí presente, tambien como senador, me quitó el placer del debate con el hoy, ex senador, el me derrotó, después, ante la justicia, con mi investigación sobre la participación de su hermano Santiago, en la investigación de control político que hice sobre el grupo paramilitar «los 12 apóstoles» en Yarumal y Santa Rosa de Osos, en Antioquia y la hacienda la Carolina, y hoy después del cambio de instancia judicial investigadora, que el mismo expresidente y exsenador Uribe produjo, ha sido derrotado en primera instancia por la justicia ordinaria, por el caso de falsificación de testigos, del que fuí víctima y no judicialicé.
Prefiero en materias que tienen que ver con la política y la gobernanza paramilitar, que ha dirigido a Colombia desde fines del siglo XX y principios del XXI, dar más la batalla política que la judicial: seducir al pueblo hacia la lucha por la democracia y la de sus propios derechos como pueblo sojuzgado por el terror.
Un genocido social y político ha ocurrido en Colombia y su desencadenador, es la apropiación del estado por el narcotráfico, como denunciara Luis Carlos Galán, asesinado, y como intentara corregir la Constitución del 91, paralizada a sangre y fuego.
Gobernanza paramilitar que ahora intento desmantelar como Presidente de Colombia y por ello votó la mayoría del pueblo colombiano.
Me corresponde proteger a Alvaro Uribe Velez y a su familia y bienes, como presidente y lo haré.
Sin embargo, tiene razón este diario extranjero: El País.
El tema de fondo es el origen y el final del Bloque Metro de los paramilitares que surgieron en San Roque en la hacienda Guacharacas, en la caída hacia Puerto Berrio, en el magdalena medio antioqueño.
Es un tema de esclarecimiento judicial cuyo juez competente es la Justicia Especial de Paz, tribunal de cierre de la justicia de paz según los acuerdos firmados por el presidente Santos y las farc, hoy, declaración unilateral de estado ante la ONU.
Siempre he solicitado a la Corte Constitucional, cumplir el acuerdo de paz y permitir la acción plena de la JEP incluso, con el sometimiento de narcotraficantes
A la JEP puede ir Uribe Vélez y entregar a Colombia una verdad que, aunque dolorosa, puede ayudar a salir definitivamente de la violencia.
Decían que el país no estaba maduro para la verdad. Toda sociedad humana está preparada para la verdad. La verdad y la justicia, la reparación de las víctimas es el camino de la Paz». Con RSF

