Judicializan en Manizales a mujer que mató a su hijita de 2 años; había tratado de quitarse la vida
Ante un juez de control de garantías de la ciudad de Manizales fue legalizada la captura de la mujer de 19 años que asesinó a su hija de dos años y once meses con un cuchillo, tras lo cual trató de quitarse la vida con la misma arma, causándose lesiones que no resultaron de gravedad.
El terrible caso ocurrió en un conjunto de apartamentos del barrio San Sebastián, de la capital de Caldas. La mujer le causó un herida en la garganta a la menor, de nombre Antonella, y fue trasladada de urgencia al SES Hospital Caldas, donde falleció 30 minutos después.
Los vecinos trataron de linchar a la madre, pero la Policía intervino oportunamente y la trasladó a la Clínica de Ospedale, donde determinaron que las lesiones no eran graves, por lo cual hizo efectiva su captura para ser presentada ante el juez de control de garantías que la judicializó por homicidio agravado.
Para este lunes se programó la audiencia de imputación y solicitud de medida de aseguramiento.
La mujer no registra antecedentes y solo se sabe que al parecer estudiaba en el Sena y quedó en embarazo a la edad de 17 años.
Mientras era atendida por su lesiones en el centro asistencial, la mujer reconoció la magnitud de su acción y declaró:
«Ella no tenía la culpa. Me enceguecí, me llené de rabia, fui a la cocina por un cuchillo, le hice daño a mi hija y me quería morir. Sé que me odian por lo que hice, por eso me quería morir».
El comandante de la Policía Metropolitana de Manizales, Coronel Dave Anderson Figueroa Castellanos, entregó declaraciones sobre el doloroso hecho, rechazando de manera categórica toda forma de violencia contra los niños y niñas.
El atroz crimen causó gran conmoción en Manizales. En el barrio, se realizó una velatón en homenaje a la niña.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, en un comunicado, repudió el asesinato de la niña de tres años, y señaló que desde el momento en el que se conoció la situación, realizó acompañamiento psicosocial a los familiares de la menor.
La violencia contra la niñez no puede ser tolerada ni normalizada. Proteger la vida y el desarrollo integral de niños y niñas es una obligación de familias, instituciones y comunidad. Los entornos protectores deben ser una prioridad de todos y todas: activar las rutas de atención y velar por el bienestar integral de la niñez, precisó.
«Desde el Bienestar Familiar hacemos un llamado a fortalecer las redes de cuidado, a no ignorar señales de riesgo y a buscar ayuda oportuna cuando existan dificultades para el ejercicio de la crianza. Es urgente que el país avance en la prevención de la violencia en el contexto familiar y en la atención de los factores que la generan, entre ellos, el deterioro de la salud mental», expresó la directora general Astrid Cáceres.
El Bienestar Familiar hizo un llamado respetuoso a la ciudadanía sobre la no difusión de videos ni de imágenes relacionadas con este caso. Compartir este tipo de contenidos revictimiza, vulnera la dignidad de las personas involucradas y profundiza el dolor de las familias afectadas. La responsabilidad colectiva también implica proteger la intimidad de las víctimas y promover una cultura de respeto y solidaridad, advirtió. Con RSF