Así fue la despedida de Wiston Muegues en Valledupar y Manaure
En medio de lágrimas, cantos y sentidas muestras de admiración, Valledupar despidió este jueves al reconocido compositor Wiston Muegues Baquero, quien falleció a los 67 años tras sufrir un infarto en su finca, ubicada en su natal Manaure Balcón del Cesar.
Las honras fúnebres se llevaron a cabo en la funeraria Exequiales Ecce Homo de la capital del Cesar, donde familiares, amigos, músicos y gestores culturales se reunieron para rendirle un último homenaje a quien dedicó su vida a retratar, a través de sus canciones, las tradiciones, costumbres y realidades de la vida cotidiana.
A las 10:40 de la mañana, se ofició una eucaristía en su memoria en la Catedral Ecce Homo de Valledupar. Posteriormente, sus restos fueron trasladados a Manaure, donde se realizaron los actos finales de despedida en medio de sentidas manifestaciones de cariño por parte de su pueblo natal, en el parque Simón Bolívar.
En la Catedral Ecce Homo la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata exaltó su memoria y obra musical, a través de la entrega del Acuerdo 007 del 16 de julio de 2025, a cargo del presidente Rodolfo Molina Araújo.
En el acuerdo se indica que el “compositor nacido en Manaure, Cesar, y dos veces ganador del concurso de la canción Inédita del Festival de la Leyenda Vallenata, seguirá siendo un referente para las nuevas generaciones, donde demostró que la sabiduría musical no se detiene en el tiempo, sino que se perpetúa en el alma del folclor”.
Durante la eucaristía, el Rey de la Canción Inédita, Julio César Daza, dedicó unas décimas a su colega, a quien describió como un compositor excepcional y dedicado a tocar corazones a través de sus letras.
Lo mismo hizo, Álvaro ‘El Ñame ‘Mendoza, quien lo recordó verseando y pidió mantener el legado de Muegues Baquero, quien además de ser un gran compositor fue un destacado ser humano.
HOMENAJES EN SU TIERRA NATAL
Después de las 12:00 del mediodía, los restos del compositor fueron trasladados a su natal Manaure Balcón del Cesar, donde fue velado en Cámara Ardiente y recibió un homenaje póstumo por parte de la Administración Municipal.
El alcalde de Manaure, Juan Carlos Araújo, confirmó que el primero de estos actos se realizó la noche del miércoles, en el marco de las festividades en honor a la Virgen del Carmen, patrona del municipio. Durante el evento, músicos, familiares, amigos y gestores culturales evocaron su vida a través de versos, canciones, anécdotas y mensajes de gratitud hacia quien consideran un verdadero juglar del folclor vallenato.
“Estamos dolidos como municipio por la partida de este gran hombre, pero la familia, consciente de que Wiston era un patrocinador y alma viva de nuestras fiestas patronales, prefirió que no suspendieramos las celebraciones en su honor. Para el Día de la Manauridad le haremos un reconocimiento especial dentro del festival, para que su legado siga vivo entre las nuevas generaciones”, expresó el mandatario municipal.
UN LEGADO PARA LA ETERNIDAD
Wiston Muegues Baquero deja una huella imborrable en el mundo del vallenato. Sus composiciones, cargadas de nostalgia, humor y amor por la tierra, lograron conectar con generaciones enteras.
Desde distintos sectores culturales han resaltado la importancia de preservar y difundir su legado, como una forma de honrar su memoria y fortalecer la identidad cultural del Cesar y del Caribe.
El municipio de Manaure Balcón del Cesar contempla declarar la próxima edición de su festival como un homenaje especial a la vida y obra de Wiston Muegues, reconociendo su invaluable aporte como juglar, compositor y defensor de las tradiciones populares.
Su hija Jadith Muegues, destacó que a su padre se le hizo una despedida como le gustaba, cantando y resaltando la cultura vallenata. “Mi padre era la alegría de la familia, fue un gran compositor de la vida, donde a lo cotidiano le creaba cantos versos”.
SAYCO LO ENALTECE
Rafael Manjarrez, presidente de la Sociedad de Autores y Compositores de Colombia, Sayco, describió a Wiston Muegues como un gran ser humano, colaborador y altruista; tenía una dimensión que no le cabía en su cuerpo.
Pero además era un hombre ingenioso y valioso, además que constituía el prototipo del hombre costeño, era atento, hospitalario y tendía la mano a todo el que lo necesitara. En el campo artístico hizo una escuela que mantenía lo auténtico, lo cual es importante transmitir a las nuevas generaciones.