Interponen acción popular por el rescate y protección del río Guatapurí
Ante un juez administrativo oral del circuito de Valledupar, fue interpuesta una acción popular por el rescate y protección del río Guatapurí, emblemático afluente al que le espera un futuro incierto y se ha convertido en el principal contaminante del río Cesar.
En tal sentido, Gustavo José Cabas Borrego, Luis Antonio Maestre Orozco y Alfonso Luis Martínez Fuentes, impetraron la medida en contra del departamento del Cesar, el municipio de Valledupar, Emdupar y Corpocesar, en respuesta a los derechos e intereses colectivos en el territorio.
Cabas Borrego reiteró que lamentablemente entre la sociedad existe una falta de conciencia para proteger las cuencas hídricas, pero también es responsabilidad del municipio, el departamento, Emdupar y Corpocesar la contaminación ambiental que se traga al río Guatapurí, al permitir el vertimiento de aguas residuales en ríos y quebradas de la región, como también al permitir que los distintos urbanizadores legales e ilegales, los utilizaran como zona de descargue de aguas domésticas e industriales.
Esta situación ha generado una alta contaminación de las aguas, la pérdida del nivel freático, el cauce de las precitadas corrientes, pérdidas de sus rondas, lugares de amortiguación y ecosistemas, pérdida del caudal de los ríos y quebradas, colmatación de las aguas negras como consecuencia de las partículas en suspensión y material de arrastre transportado en cada uno de ellos y alteración ostensible al medio ambiente, según lo revelan los reiterados informes que se ha radicado a las autoridades sobre la situación del Guatapurí.
La Constitución Política de Colombia en su artículo 79 establece: “Todas las personas tienen derecho a gozar de un ambiente sano. La Ley garantizará la participación de la comunidad en las decisiones que puedan afectarlo. Es deber del Estado proteger la biodiversidad e integridad del medio ambiente, conservar las áreas de especial importancia ecológica y fomentar la educación ambiental para el logro de estos fines”, argumentan los demandantes.
Según lo refleja el documento presentado por los querellantes, “Durante la monitorización del río se evidenció la escasa prioridad a la acción y participación ciudadana en la gestión ambiental del municipio. La salud de las personas de la comunidad de los barrios “subnormales” está en riesgo, principalmente la de los niños, que juegan en los sitios destinados para arrojar las basuras, bañándose también en las aguas contaminadas y muchas veces se exponen a respirar el aire contaminado procedente de las quemas de los residuos peligrosos.
“La degradación ambiental en los sectores comprometidos ha causado pérdida de la biodiversidad en el ecosistema formado por la cuenca del río Guatapurí, tanto así que es raro encontrar en esos sectores animales como las iguanas, las ardillas, los micos y los conejos. Se evidenció la disminución de las especies acuáticas a su paso por el casco urbano de la ciudad. La degradación ambiental de la Margen Derecha en los sectores comprometidos se agudiza cada año debido a la falta de la vigilancia y monitoreo por parte de los entes encargados de la protección ambiental, entre otros argumentos”.
